El aumento se debió en gran parte a las restricciones impuestas por India, uno de los mayores productores de arroz del mundo, que contribuye con el 40% del suministro global de este cereal. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) alertó al mundo sobre esta situación el pasado viernes.
Este incremento en el precio del arroz, de acuerdo al índice general de alimentos de la FAO cayó un 2.1% en agosto. Este descenso se atribuye a la disminución en los precios de los aceites vegetales, los productos lácteos y los granos.
El índice general de alimentos, que mide una canasta básica de productos alimenticios, se encuentra actualmente un 24% por debajo del máximo alcanzado en marzo de 2022. En ese momento, la invasión rusa en Ucrania afectó significativamente la producción de granos en ambos países, ya que son grandes productores.
El arroz es un alimento fundamental en muchos países y su precio en los mercados internacionales ha estado en constante aumento debido a varios factores, incluida la pandemia de COVID-19, el conflicto en Ucrania en 2022 y perturbaciones en la producción relacionadas con el fenómeno meteorológico de El Niño.
En cuanto a otros alimentos, el precio de los cereales disminuyó un 0.7% en comparación con julio, influenciado por la caída del 3.8% en los precios del trigo en agosto debido a una mayor disponibilidad por parte de los principales exportadores. Los precios de los cereales secundarios también cayeron un 3.4% debido a una cosecha récord de maíz en Brasil y el inicio inminente de la cosecha en Estados Unidos.
Por otro lado, el índice de precios del azúcar de la FAO aumentó un 1.3% en comparación con julio y se situó un 34.1% por encima del nivel del año anterior en agosto, debido a preocupaciones sobre el impacto de El Niño en los cultivos de caña de azúcar y condiciones climáticas adversas en algunas regiones.