Un análisis de los fundamentos sólidos sobre los que se sustenta la economía nacional y que permiten ser optimistas sobre su desempeño, hizo el Gobierno Nacional. La economía colombiana es fuerte, está sustentada en sólidos pilares y ha sido manejada con inteligencia y responsabilidad, declaró Santos.
Hizo un llamado al optimismo y a ver el futuro con mejores ojos, sobre todo con las favorables expresiones de respaldo al manejo inteligente de la economía que le han brindado los máximos organismos financieros y los mercados de deuda.
Ese buen manejo permitió asimilar muy bien el duro impacto que significó la caída de los precios internacionales del petróleo, el Fenómeno de El Niño y la fuerte devaluación del peso.
El manejo responsable de la economía permitió que le país siguiera creciendo a los mejores niveles para alguna economía de América Latina, sin descuidar la lucha contra la pobreza, la generación de empleos y el apoyo a programas sociales para los colombianos más vulnerables.
“Hay 10 razones por las cuales podemos ser optimistas de cómo vamos a terminar el Gobierno. Estamos empeñados en terminar con broche de oro”, expresó.
Las bases de la fortaleza de la economía colombiana
1. Reducción de la inflación, que estaba en 8,96% en julio de 2016 y ha bajado a 4,66% en abril. Al final de 2017 estará cerca del 4%, techo del rango meta del Banco de la República.
2. El sistema financiero permanece sólido, canalizando recursos a los sectores productivos de la economía. El sector creció 4,4% en el primer trimestre de 2017. Las tasas de interés han venido reduciéndose, lo cual permitirá mayor crecimiento de la demanda interna.
3. El sector agropecuario se expande a tasas históricas. El PIB cafetero creció 11,5% en el primer trimestre de 2017, y el resto del sector agrícola lo hizo 12%.
4. La confianza de los consumidores lleva tres meses en franca recuperación (febrero, marzo y abril). Ha mejorado tanto la percepción de condiciones económicas como las expectativas del consumidor.
5. Confianza en la política fiscal. Las tasas de los TES han bajado consistentemente desde febrero de 2016. Estuvieron cerca de 9% en el momento de mayor incertidumbre y ahora están cerca de 6%. Esto refleja la calificación BBB con perspectiva estable de Fitch y Moody’s. Se espera que en la próxima revisión, a comienzos de 2018, Standard & Poor’s regrese la perspectiva de la deuda a estable.
6. Las brechas sociales continúan reduciéndose. La pobreza multidimensional cayó a 17,8% en 2016 (vs. 20,2% en 2015 y 30,4% en 2010). La desigualdad también ha caído y se ubicó en 0,517 en 2016 (vs. 0,522 en 2015 y 0,560 en 2010).
El mercado laboral ha mostrado resiliencia. El desempleo cayó en marzo de 2017 a 9,7% (vs. 10,1 en marzo de 2016), y por primera vez en la historia hay más empleados formales que informales en las 13 principales ciudades (formalidad: 50,2% del total de ocupados).
7. El ajuste externo se ha producido de forma ordenada. En 2017 el déficit en cuenta corriente será cercano a 3,6% del PIB (vs. 4,4% en 2016 y 6,4% del PIB en 2015). Las exportaciones totales crecieron 37,9% en marzo 2017, sin petróleo ni derivados 40,5%.
8. La tasa de inversión se ha mantenido alta a pesar del ajuste, fue 27,3% del PIB en 2016, la más alta de la región. Este año se observará una recuperación de la inversión en petróleo, gracias a los mejores precios internacionales y a la mayor eficiencia en la operación del sector petrolero espera aumentar la inversión 115% (de USD$2.290 a 4.940 millones).
9. La educación es la mejor inversión para el crecimiento de mediano y largo plazo. Este año el presupuesto será de $35 billones. De lejos el más alto de la historia y entre los sectores presupuestales.
10. La paz estable como estrategia para superar el principal cuello de botella que por años restringió el crecimiento de amplios sectores y regiones del país.