Los tenderos de todo el país anunciaron cierre de sus establecimiento ante la ola de cierres y sanciones impuestas por trasgredir el Código de Policía lo que ha llevado al cierre de mas de 17.000 negocios y los está llevando a la quiebra.
Los tenderos anuncian marchas en las principales ciudades del país para reclamar ante las autoridades mayor flexibilidad para desarrollar su trabajo.
Barranquilla lidera la protesta general con cierre de los pequeños comercios, a los que no se les permite el expendio de cerveza en una ciudad de alta temperatura.
El cierre de todos los establecimientos, denominados tiendas de barrio en todo el territorio nacional, estaría previsto para el próximo 24 de octubre y las demandas contra el Código ya superan las 100.
Pero en Barranquilla ya vienen trabajando en soluciones. La Alcaldía, la empresa privada, los gremios y los tenderos convocaron una mesa de trabajo para tratar de llegar a acuerdos y que las normas no sean la excusa para libres interpretaciones de las autoridades y duras sanciones para sus negocios.
Los gremios representados en Andi, Fenalco, Fenaltiendas, y empresas como Bavaria reconocen el apoyo que han recibido del alto mando de la Policía, pero especificamente en pequeños municipios y en ciudades intermedias, donde el nuevo Código Nacional de Policía y Convivencia Ley 1801 de 2016, tiene una variedad de interpretaciones que han permitido incluso que en una ciudad importante estén pensando cobrarle a las tiendas un impuesto adicional por cada metro cuadrado del establecimiento.
Pero para las grandes capitales, como Bogotá, Barranquilla, Cartagena, Monteria y emn general, ciudades de cklimas cálidos, donde la venta de cerveza es fuente de ingresos, el control es muy estricto.
Los tenderos se quejan de un acoso por parte de autoridades al exigir hasta un certificado de uso de suelo, certificado de Cámara de Comercio, y les exigen que cumplan con el pago de Sayco y Acimpro.
Las empresas cerveceras destacan que las ventas netas estuvieron 10,3% por debajo de lo presupuestado, debido a que la cerveza en ciudades de climas cálidos principalmente, es un producto de gran consumo en estos establecimientos.
Los pequeños comerciantes claman del gobierno en cada ciudad, que si bien asuman el control de actos que violen el Código, permitan que un usuario pueda consumir una cerveza en clima cálido y poder sentarse a disfrutar su bebida con la cual amaina el impacto de la fuerte temperatura.
