La tarea liderada por la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) ha permitido que cerca de 10.000 excombatientes de Farc y personas de la zona de influencia de los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (ETCR) hagan parte del sistema educativo en los niveles de educación primaria y/o secundaria.
De hecho, con el programa se benefician 5.879 excombatientes de las Farc y 3.945 miembros de la comunidad.
“Más de 733 personas han culminado sus estudios de bachillerato en el marco de estos convenios de educación flexible, en 29 ETCR, en todo el territorio nacional. Así seguimos avanzando por una ruta planificada, de la mano de la cooperación internacional y la Universidad Nacional Abierta y a Distancia (Unad)”, afirmó el Director General de la ARN, Andrés Stapper.
De los 733 excombatientes de Farc que ya terminaron sus estudios y recibieron su cartón de bachiller, 22 se graduaron el pasado miércoles, no solo en el nivel de secundaria, sino también en programas de alfabetización digital y orientación vocacional.
Cabe indicar que esta iniciativa fue desarrollada a través de la ARN, el Consejo Noruego para Refugiados (NRC), el Ministerio de Educación Nacional, el componente Farc y la Fundación Colombiana de Excombatientes y Promotores de Paz (Fucepaz).
“Queremos llegar al 100 por ciento de la población en proceso de reincorporación para que afiance sus conocimientos y sus capacidades. Con esto fomentamos los procesos de reincorporación social, económica y política de manera sostenible”, destacó el Director de la ARN sobre este modelo que ratifica el compromiso del Gobierno Nacional de facilitar, desde la legalidad, los procesos de reincorporación y reconciliación con las comunidades que fueron afectadas por el conflicto armado.
Con respecto a los resultados del programa, el Director de país del Consejo Noruego para Refugiados, Christian Visnes, enfatizó que “la paz sólo es posible si se promueve la reconciliación y la educación en los territorios más afectados por el conflicto armado”.
Agregó que “la transformación del país sólo será posible con la decidida inversión del Gobierno nacional para la implementación de los acuerdos de paz, especialmente en los territorios de más difícil acceso”.
Por su parte, Julieth Villa, excombatiente de Farc, del ETCR El Oso, ubicado en Planadas (Tolima), resaltó su participación en el proyecto educativo.
“Regresar al colegio fue una muy buena experiencia. Tuvimos un intercambio con la población aledaña que también se alfabetizó con nosotros. Estudiar para mí es una oportunidad para salir adelante. Después de graduarme sé que vienen nuevos retos de empleo y cursos”, declaró la excombatiente.
El desarrollo del proceso educativo y el acompañamiento institucional de la ARN también ha permitido fortalecer capacidades y homologar saberes previos enfocados a la sostenibilidad económica, para que los excombatientes puedan acceder en un futuro a talleres de formación técnica o tecnológica, o continuar con educación superior, de acuerdo con sus intereses.