El FBI reportó que un grupo de al menos nueve iraníes que al parecer trabajan para los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica piratearon las computadoras de 7998 profesores en 320 universidades de todo el mundo en los últimos 5 años.
Los responsables, que el FBI ya exhibe en un cartel y está tras sus pistas, habrían robado 31,5 terabytes de documentos y datos, incluidas investigaciones científicas, publicaciones de revistas y disertaciones. Entre los afectados también figuran las Naciones Unidas, 30 empresas norteamericanas y cinco agencias gubernamentales de EE. UU.
Aunque el organismo no reveló las universidades que habrían sido afectadas, declararon alerta máxima para ejercer control cibernético en estas entidades.
El asalto cibernético masivo es «una de las mayores campañas de piratería», dijo en una rueda de prensa el fiscal federal Geoffrey Berman del Distrito Sur de Nueva York, donde se presentó la acusación. De acuerdo al fiscal, los piratas informáticos iban tras información relacionada con “innovaciones y propiedad intelectual de las mentes más brillantes de nuestro país».
De acuerdo a un reporte sobre el tema de la revista Science, los acusados vendieron los datos robados a través de dos sitios web, Gigapaper y Megapaper. La operación buscaría ayudar a las universidades iraníes, así como a las organizaciones científicas y de investigación de ese país, a acceder a información privilegiada.