Alrededor de 6.500 tiendas que funcionan en Barranquilla, cerrarían sus puertas este martes 24 de octubre en protesta por la aplicación del Código de Policía, el cual consideran se hace de forma desproporcionada con este gremio.
Los tenderos de la ciudad anunciaron que acudirán todos a la Plaza de la Paz donde se reunirán e iniciaran una marcha de protesta hasta la alcaldía de Barranquilla.
Undeco, gremio que acoge a los tenderos, destaca que se han reunido con las autoridades tant5o del Distrito como la Policía sin que la situación mejore y que en asamblea general desarrollada a principios de Octubre, se determinó el cierre de establecimientos como protesta y la marcha para reclamar sus derechos.
Cerca de mil afiliados aprobaron la protesta y este martes cerraran los establecimientos en procura de buscar solución a la problemática.
Los tenderos, se reunirán en la Plaza de la Paz, para hacer una marcha hasta la Alcaldía Distrital dejando sentada de esta forma su voz de protesta por esta situación que afrontan. La marcha, esta prevista desde las 9 de la mañana de acuerdo a lo programado por Undeco.
En lo que va corrido del establecimiento del Código de Policía, en el Área Metropolitana se han cerrado 800 establecimientos de comercio.
La gravedad de la situación deriva en que si se trata de un un almacen, miscelanea o ferretería, la mercancía no se deteriora mientras que una tienda, un cierre por sellamiento de diez días es la ruina para los tenderos que no pueden recuperar mercancías que necesariamente requieren refrigeración.
Los productos perecederos como frutas, verduras, pollo, carne y lácteos, no se pueden vender después de un cierre como el que viene sucediendo por la interpretación del Código.
Orlando Jiménez directivo de la agremiación señaló que «la Policía llega a los establecimientos y solicita los documentos, si existe alguna anomalía, de inmediato proceden al cierre del establecimiento sin ninguna alternativa para que el pequeño comerciante solucione la situación. Eso perjudica al comerciante porque es un cierre hasta de diez días lo cual nos perjudica notoriamente en la economía de estos micro empresarios».
Undeco señala que «hemos solicitado a las autoridades que generen un acta y se establezca un compromiso para que el comerciante tenga esos días para tramitar o corregir la documentación y no perjudicar al empresario con una sanción de un tiempo tan extenso. Si el comerciante no cumple, entonces si deberá proceder con el cierre«.
El vocero de los comerciantes señala que en Barranquilla, destaca que otro de los puntos es que se le ha dado el carácter de espacio publico a las terrazas y con una temperatura tan elevada como la que registra la Costa y especialmente Barranquilla, un usuario no pueda sentarse a la sombra de un parasol a degustar un refresco.
«Los establecimientos de comercio, en su mayoría tiene una carpas para evitar los rayos del sol y si el comerciante ubica ahí una silla inmediatamente la Policía lo señala como transgresor del espacio publico y si hay una silla o mesa o una tradicional venta de chance, inmediatamente se toma la decisión de sellar el establecimiento, perjudicando a los tenderos».
Para las autoridades eso es un uso indebido del espacio público, mientras en otros sectores pululan las ventas callejeras sin pago de impuesto o control alguno, advierten.
En lo que va corrido del establecimiento del Código de Policía solo en el Area Metropolitana se han cerrado 800 establecimientos de comercio.
Hay que reglamentar el uso de espacio público con estos establecimientos
Los tenderos solicitaron a la Alcaldía modificar el POT, el Plan de Ordenamiento Territorial, donde los únicos perjudicados son este tipo de negocios debido a estricto control que sobre ellos ejercen las autoridades.
La solicitud contempla igualmente que se modifique el Estatuto Tributario porque se les está cobrando por el uso de las carpas o parasoles pero se imponen multas cuando son utilizadas. Son $738 mil que se debe pagar por el uso de carpas, pero sin derecho a ubicar ahí siquiera una silla para la comodidad del usuario
Señalan que deben pagar un impuesto por su uso pero no permiten que nadie se siente bajo ellas, lo cual no es objetivo.
«Busquemos la forma que el impuesto de las carpas no se tenga que pagar, busquemos la forma que las terrazas no sean consideradas espacios públicos sino privados, no para abusar de esto sino para poder atender a los usuarios con comodidad» destaca Undeco.
Para las autoridades eso es un uso indebido del espacio público, mientras en otros sectores pululan las ventas callejeras sin pago de impuesto o control alguno, advierten.