El Plan Estratégico Aeronáutico 2030, proyectado por la Aeronáutica Civil, es el mapa de desarrollo operaciones en el país previsto al 2030, en un entorno institucional claro, competitivo, conectado, seguro y sostenible, soportado en una infraestructura renovada, una industria robustecida y un talento humano de excelencia.
Movilizar 100 millones de pasajeros y duplicar el transporte de carga en un entorno institucional claro, competitivo, conectado, seguro y sostenible, soportado en una infraestructura renovada, una industria robustecida y un talento humano de excelencia.
El Plan Estratégico Aeronáutico 2030, propone contar con mecanismos efectivos para la protección de los derechos del usuarios, frente a los servicios ofrecidos en el transporte aéreo, para mejorar la calidad y satisfacción de éstos.
Se identificaron 6 líneas de acción fundamentales para proyectar el sector aéreo a 2030. Fueron analizadas a través de notas de estudio, modelo OACI, para identificar dónde estamos y a dónde queremos llegar. Se logró conocer la percepción y los retos fundamentales del sector, para lograr su crecimiento. Se inició la construcción del Plan Estratégico Aeronáutico 2030, desde el sector, y con la Aerocivil como agente del cambio.
Centro de investigación de accidentes
Uno de los aspectos del Plan será el poder implementar un centro de investigación de accidentes aéreos, con tecnología y expertos que desarrollen autónomamente procesos de investigación, para prevenir futuros accidentes e incidentes en la aviación civil. Prestar los servicios de navegación aérea bajo una estructura orientada hacia el usuario y vinculada al Plan de Navegación Aérea, para el desarrollo del Sistema Nacional del Espacio Aéreo – SINEA.
En materia de conectividad, Aerocivil propone construir una red de servicios de transporte aéreo eficiente que una las regiones del país con los principales centros de producción y de consumo nacionales y del mundo, aprovechando su capacidad integradora.
Promover la conectividad interurbana o regional, facilitando la operación de helicópteros desde una infraestructura pública adaptada a la operación 24 horas, a fin de explotar las oportunidades que brindan estos equipos.
Igualmente simplificar y racionalizar el esquema de costos del transporte aéreo asociado a la carga tributaria, parafiscales y de sobretasas, a través del desarrollo de políticas públicas y propiciar alternativas para la distribución de combustible en los aeropuertos, que permitan la toma de decisiones comerciales por parte de los operadores del transporte aéreo, y evitar distorsiones en los precios del combustible de aviación por su carga tributaria y otros factores.
Lograr un mercado competitivo de prestadores de servicio, a través de la simplificación de regulaciones, la eliminación de barreras al crecimiento y la promoción del ingreso de nuevas inversiones en las actividades de la aviación civil.
Finalmente, el proyecto plantea la necesidad de contar con una infraestructura para el Aeropuerto Ciudad Región, en la sabana de Bogotá, con una visión integradora y capacidad suficiente para continuar facilitando el desarrollo de la actividad del transporte aéreo sin restricciones al desarrollo.