La cadena de ventas retails D1, de propiedad mayoritaria del Grupo Santo Domingo, se consolidó en 2013, la apertura de las tiendas Ara, del grupo portugués Jerónimo Martins, y a partir de marzo de 2016, Justo & Bueno, cadena creada por los antiguos fundadores de D1, hacen que este segmento haya causado revolcón en ventas.
El poder adquisitivo de los colombianos se redujo 7% entre diciembre y enero pasados, mientras que la frecuencia de compra de los hogares colombianos cayó, al pasar de 5% en diciembre del año pasado a 1% en este enero.
El sistema retails, término inglés para comercio al por menor o al detalle, se consolida cada día más en el país.
Las tres cadenas que hacen parte de este modelo respondieron al cierre de 2016 por 7% de las ventas totales del comercio, cuando en 2013 apenas representaban 1%, según datos de la analista de mercados Nielsen.
Sus balances dan cuenta del crecimiento astronómico en 2016; vendieron más de $3,3 billones, lideradas por D1, con un aumento de 100%, tras alcanzar $2,2 billones; Ara, con $830.367 millones y un crecimiento de 111%, mientras Justo & Bueno, en nueve meses de operaciones llegó a $229.942 millones.
En términos de puntos de venta, D1 comenzó este mes de abril con 600 tiendas, mientras que Justo & Bueno alcanzó 255 puntos y Ara se acerca a 230.
Exhibir los productos de una manera menos sofisticada, recibir solo efectivo y cumplir con la promesa de transferir estos ahorros al precio final, manteniendo la buena calidad, es lo que lleva al consumidor a tener la sensación de estar haciendo compras inteligentes, dice los analistas de Kantar Worldpanel, a traves de Dinero.com.
Hay un nuevo comprador, el que busca el menor precio posible en categorías de consumo masivo, aprovechando que la calidad de las marcas de bajo precio es muy cercana a las de las marcas reconocidas, señalan los analistas.
El modelo no incluye fuertes inversiones en mercadeo, empaques vistosos y parqueaderos para asegurar las visitas de los clientes; ahora las tiendas de descuento están generando un revolcon en materia empresarial.
El resultado es notorio. Por un lado, ha generado un boom del que son protagonistas las pequeñas y medianas compañías industriales que maquilan o producen marcas para este canal. Y, por el otro, está induciendo a bancos y grandes superficies a ajustar sus estrategias.
El sector financiero, por ejemplo, planea ajustar sus condiciones para no desaprovechar esta oportunidad y ya algunas entidades financieras diseñan estrategias para no quedar por fuera de este canal –que solo recibe pagos en efectivo–. Esto podría implicar un cambio sustancial en la negociación de las comisiones.
Los otros canales de comercio tampoco se quedan quietos y buscan mantener su participación innovando con nuevos formatos físicos–incluso franquicias–, y con una fuerte apuesta en comercio digital, cuyos resultados comienzan a sorprender.
La presidente de Acopi, Rosmery Quintero, señala que desde que comenzó a hablarse de globalización se inició un proceso de recomposición de la estructura empresarial “y cada quien está buscando adaptarse al nuevo entorno global”. Eso sí, reconoce que la transformación ha ido mucho más rápida en los últimos años y en estos cambios las Pymes colombianas han sido protagonistas.
“Los canales de descuento han ganado espacio como opción de compra de los colombianos, en tanto que han contenido la caída de la canasta familiar. Si no fuera por este tipo de puntos de venta, la caída de la canasta sería de 2%” Kantar Worldpanel .
(Con información de Dinero.com)