Una ponencia para el primer debate de la adición presupuestal, presento el Gobierno al Congreso,la cual ascenderá a $16,9 billones para el presente año.
Este monto difiere de los $23 billones mencionados inicialmente al radicarse el proyecto en febrero pasado.
De aprobar el Congreso, la inversión para el año 2023 ascendería a $83,3 billones, lo que representa un aumento del 19,5% en comparación con el presupuesto de 2022. Por otro lado, los gastos de funcionamiento alcanzarían los $260,7 billones, de los cuales $78,4 billones se destinarían al pago de la deuda.
La financiación de esta adición provendrá del recaudo derivado de la Ley 2277 de 2022, conocida como la reforma tributaria. Según el documento, los fondos se destinarán a la reactivación económica mediante programas de gasto que serán ejecutados en el segundo semestre del año.
El ministro de Hacienda Bonilla ha manifestado que la estrategia del Gobierno con esta adición presupuestal busca garantizar una ejecución eficiente y efectiva de lo aprobado. Es imperativo que los recursos adicionales se enfoquen en la reactivación económica. Para lograr este propósito, se tendrá en cuenta el estado de ejecución de las asignaciones vigentes y las pendientes.
En cuanto a la distribución de los recursos de la adición, se asignarán $9,1 billones a inversión, $7,3 billones a funcionamiento y $500.000 millones al servicio de la deuda.
El sector de Educación sería el que recibiría la mayor asignación adicional, con un total de $2,2 billones, de los cuales $1,15 billones corresponderían a recursos de funcionamiento y $1,05 billones se destinarían a inversión. De estos últimos, $550.000 millones estarían orientados a financiar el Plan de espacios educativos como centro de la vida comunitaria, así como la construcción, adecuación, adquisición y dotación de aproximadamente 16 sedes de Instituciones de Educación Superior Públicas. En total, el sector de Educación contaría con $57 billones para el presente año.
En cuanto al sector de Salud, recibiría una asignación adicional de $2,03 billones, los cuales se destinarían al aseguramiento en salud debido al impacto de las variables macroeconómicas en la prestación de servicios. Estos fondos serían transferidos a la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres).
El tercer lugar lo ocupa el sector de Vivienda, con una asignación adicional de $1,5 billones. Estos recursos se destinarían a proyectos relacionados con los programas de vivienda «Cambia mi casa», vivienda rural y «Mi casa ya». Además, se destinarían fondos para cubrir los faltantes en la Comisión de Regulación de Agua Potable y Saneamiento Básico (CRA).
El Ministerio de Hacienda se prepara para dar a conocer el Marco Fiscal de Mediano Plazo, un informe crucial que actualiza las cuentas del Gobierno y establece las previsiones económicas. Sin embargo, algunas de estas estimaciones ya han sido adelantadas en el proyecto de adición presupuestal.