En el marco del Congreso de Confecámaras, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, reveló que el 20 de octubre es la fecha límite para que el Congreso tome una decisión sobre el Presupuesto General de la Nación (PGN) para el 2025. Si el Congreso no lo aprueba para esa fecha, será necesario emitir un decreto para su adopción.
«Después del 20 de octubre se sabrá si sale por decreto o no. Hasta entonces, el Congreso tiene la responsabilidad de discutir los componentes del presupuesto y la ley de financiamiento antes del primer debate, que se centrará en el gasto», señaló el ministro Bonilla.
Min Hacienda explicó que, aunque el Congreso tiene la facultad de aprobar la ley de financiamiento tras la discusión del presupuesto, esto no implica una aprobación automática. De hecho, aclaró que el Congreso podría aprobar la ley de financiamiento incluso después del 20 de octubre.
«Es constitucional que un Gobierno presente un presupuesto y anuncie que necesita financiar una parte. Esto se ha hecho en el pasado, incluso durante el Gobierno de Duque, que tuvo dos leyes de financiamiento», indicó Bonilla.
Actualmente, el debate se centra en la negativa de algunos congresistas para discutir la ley de financiamiento. Estos proponen un umbral de $511 billones para el presupuesto de 2025, aunque el monto total del proyecto es de $523 billones, incluidos $12 billones correspondientes a la ley de financiamiento.
«No se ha negado ningún monto del presupuesto, ya que no se ha tomado una decisión. Si el Congreso no lo aprueba, la norma establece que se aplicará el presupuesto presentado por el Gobierno», explicó Bonilla, subrayando que, si es necesario, el presupuesto será adoptado mediante decreto, tal como lo permite la ley.
El ministro puntualizó que «El Gobierno no se puede quedar sin presupuesto».
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