Un incremento del precio de la tonelada de acero en el mercado interno colombiano de 104% en menos de un año, refleja la preocupación del sector de acuerdo a la ANDI.
“Mientras en mayo pagábamos $693.000 por tonelada de chatarra, a febrero de 2021, se estaba pagando $1.112.000 por tonelada”, manifestó la portavoz María Juliana Ospina, directora de la Comité de Acero de la ANDI.
El incremento en el precio de este insumo que buena parte se va para la construcción, podría frenar el impulso que ha tenido la compra de vivienda, el gran motor que ha movido la economía desde que se reactivó esta actividad durante la pandemia.
Este incremento en los precios afectaría la futura demanda de vivienda, por el incremento en el valor final de las unidades habitacionales.
De acuerdo a Camacol, la situación actual de aumento de la demanda contra poca oferta, lo cual ha llevado a elevar los precios del acero, es coyuntural y no tiene por qué aminorar el buen ritmo de la compra de vivienda que se ha visto en los meses más recientes. “El consumo de acero para la vivienda VIS representa un 7,6 % y en no VIS es un 5,49%».