Carta Abierta de Iván Márquez
Tres circunstancias se interpusieron insalvables en mi cuenta como senador dela República este 20 de julio en desarrollo del Acuerdo de Paz.La primera de ellas, es el montajejudicial o entrampamiento urdido por el FiscalGeneral y la DEA que hoy tiene injustamente tras las rejas en Jesús Santrich yentre la vida y la muerte al proceso de paz. El Fiscal hundió el puñal de susresentimientos en el corazón de la confianza y en el propio corazón de la inmensamayoría de los guerrilleros.
La segunda, es la impresionante desfiguración del JEP que hoy haceirreconocible esa Jurisdicción comparada con el texto original firmado por laspartes en La Habana. No hay antecedentes en el planeta tierra en el queun acuerdo de paz, luego firmado y celebrado por los plenipotenciarios de laspartes, haya sido modificado al antojo de personas interesadas, ajenas a esaconstrucción.La tercera circunstancia es que no se ve por ninguna parte la decisión decumplir con las obligaciones esenciales del acuerdo como la Reforma Política, sin la cualno habrían condiciones para el tránsito de la rebelión armada a la política legal. Esinconcebible que 5 años después de la aprobación del primer acuerdo parcial sobretierras, estas no hayan sido formalizadas o tituladas a favor de los campesinos queactualmente las poseas.
Sin menospreciar el rol de la incompetencia de losfuncionarios del Estado, el ciudadano deun pie percibe también que tiemblan depavor frente a los latifundistas y despojadores de tierras. Aun respirando en la gran mayoría la esperanza de salvar este proceso de paz quenos puso a todos a soñar en la Colombia del futuro.
Es necesario volver al textooriginal del Acuerdo firmado. La Habana y el extranjero depositaron ante el Consejode la Federación Suiza como un acuerdo especial del artículo 3 de los Conveniosde Ginebra, y posteriormente ante el NNUU como una declaración unilateral deEstado. El Acuerdo de Paz es el Documento Oficial del Consejo de Seguridad, locual genera en Colombia una obligación internacional de cumplimiento.Siento que la paz de Colombia está atrapada en la red de la traición, y no tantoporque no se ha materializado lo necesario -que requiere unos tiempos para suconcreción-, sino por las modificaciones introducidas que desfiguraron el acuerdo.El acuerdo que hoy nos muestra no es el que firmamos en La Habana.
Los artefactos locos de ese Frankenstein son el Fiscal General, algunos parlamentariosasustados con la paz y la verdadpapá, la Corte que como veleta cambia sus decisionessegún los vientos políticos, y el propio Gobierno. ¡Pacta Sunt Servanda! Los acuerdos son para cumplirlos.Quiero agradecer al profesor Jairo Estrada la antorcha de las reflexiones quesiempre hacen el camino de la política y donde me invitan como soy senador de la República este 20 de julio.
En el mismo sentido, de gran impactotambiénfuepara mí la carta de Gustavo Petro llena de humanidad, de fe en el rol denuestra juventud en la construcción de la Colombia del futuro. Gracias, muchasgracias a los dos. Seguir trabajando día y noche sin cesar por la consolidación dela paz de Colombia, por el cumplimiento de lo acordado, por la reincorporala sociedadsocial y económica de los guerrilleros en los ETCR, la inseguridad jurídica paranadie, así como la evadiendo los militares lanzados por el comandodel ejército contra mí y contra Oscar Paisa, decisión que le importa un comino o notiene en cuenta que hay de por medio un acuerdo para la terminación del conflicto.
Pido a las organizaciones sociales y políticas del país mantener en alto elestandarte de la paz, sin desfallecer. La paz es el más elevado de todos losderechos y sin él no seremos nada como nación. Seamos sus misioneros. Nopermitieron que las obstrucciones señaladas echen el más extraordinariologro de Colombia en las últimas décadas.Que el caso Santrich y la perfidia o traición del Estado al acuerdo de Paz no seconviertan en el detonante del retorno a la confrontación. No puedo permitirque se queme el pan en la puerta del horno. Nos gusta más trampaspara sabotear la paz.
IVÁN MÁRQUEZ
Julio 15 de 2018